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¿Qué es una vivienda pasiva?

El concepto de casa pasiva, que últimamente está en auge con motivo de la eficiencia energética, del mayor conocimiento del entorno y la huella que dejamos en él, no es otro que el de una casa eficiente donde se busca reducir al máximo la demanda energética mediante estrategias de diseño global.  

Es decir, que están diseñadas a partir de patrones preestablecidos en los que la eficiencia energética se convierte en un pilar fundamental del diseño y conceptualización de la vivienda.  

Principios básicos  

Aunque el concepto de vivienda pasiva suene muy novedoso, ya en la Alemania de la década de los 90 se acuñó el concepto de Passivhaus, y se basa en cinco principios básicos: aislamiento térmico, hermeticidad, eliminar puentes térmicos, ventanas y puertas de calidad y ventilación con recuperación de calor.  

Aislamiento térmico: Un aislamiento térmico de calidad, gracias a muros exteriores, cubiertas o suelos, permiten reducir el consumo de energía hasta en un 30% gracias a preservar el calor interior durante los meses más fríos.  

Hermeticidad: Evitar las filtraciones de aire, polvo, o la pérdida de calor es necesario para conseguir una casa totalmente eficiente, y para ello necesitaremos sellar las uniones de los distintos materiales utilizados en la construcción de modo que se cree un efecto de estanqueidad efectivo y eficiente. 

Eliminación de puentes térmicos: Los puentes térmicos son zonas envolventes de los edificios por los que se genera una considerable pérdida del calor concentrado en el interior de una vivienda como en fachadas, techos o cualquier otra zona que limite la construcción con el exterior. Al eliminarlos se consigue mantener la temperatura ideal interior y así, conseguir una mayor eficiencia energética.  

Ventanas y puertas de calidad: Al igual que ocurre con el aislamiento térmico, la instalación de ventanas de alta calidad evitará la pérdida de calor que suele producirse cuando esta instalación o los materiales de esta, son de baja calidad, y que puede llegar a alcanzar entre el 25 y el 30% de nuestro consumo de calefacción. 

Sistema de ventilación: Un correcto sistema de ventilación permite distribuir el aire fresco en el interior de la vivienda para disfrutar de una buena calidad de aire. De esta forma podremos prescindir de la instalación de sistemas de refrigeración. 

Si contamos con estos estos requisitos en la edificación de nuestra vivienda, el ahorro de energía puede llegar a ser de hasta un 90%. Pero además de contar con estos pilares básicos para la consecución del estándar Passivhaus, el tipo de arquitectura juega un papel fundamental, así como el uso de materiales específicos no contaminantes y el bajo o nulo impacto en el paisaje, que permite reducir la contaminación visual del entorno. 

¿Casas pasivas o Edificios de Consumo Casi Nulo?   

Si bien el objetivo de ambos estilos busca la construcción de edificios o viviendas con un ahorro final del consumo energético, cada uno tiene unos requerimientos específicos para lograr la distinción, siendo el estándar Passivhaus más exigente que el de los ECCN.  

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