Cómo proteger tus placas solares

Para proteger las placas solares es fundamental conocer qué cubre la garantía del fabricante y de qué forma hay que asegurarlas para hacerlo correctamente. 

Comprar placas solares supone una inversión inicial importante. Es conveniente tener especial cuidado con los daños que se puedan ocasionar y asegurarlas correctamente con un seguro para instalaciones solares. Al margen de la calidad del sistema fotovoltaico y de la garantía, hay daños materiales que pueden surgir y podemos encargarnos de ellos contratando un seguro para placas solares. 

De todas las formas que hay de proteger las placas solares, aquí te damos algunas ideas útiles para hacerlo de la mejor manera. 

¿Qué seguro para placas solares protege mejor mi instalación? 

En general, los seguros de hogar son la mejor opción para tener tus placas solares protegidas. Aunque es importante tener en cuenta que algunos seguros que no cubren los daños ocasionados en los paneles, por eso te recomendamos que revises las especificaciones de la póliza de seguro de hogar para saber si están incluidos los daños no cubiertos por la garantía de las placas solares.  Por otra parte, con el auge de las placas solares, es posible que ya existan seguros específicos para placas solares en domicilios. 

Por lo general la diferencia en cada aseguradora es que es diferente si son un componente de la construcción de la vivienda o si son una parte incluida en el domicilio, lo que suele decirse comúnmente, si son continente o contenido. 

Cuando los paneles se enfocan como continente, es decir, como un componente de la construcción de la vivienda, se tienen en cuenta como dispositivos fijos necesarios para su funcionamiento, igual que se haría con una instalación de energía eléctrica, de agua, de gas o calefacción. En este caso el seguro cubriría todos los daños ocasionados a las placas. 

En el caso de que el sistema fotovoltaico se entienda como contenido, es importante contratar un seguro que sirva para el contenido del domicilio, debido a que el seguro de la vivienda no se hace cargo de los perjuicios asociados con los sistemas fijos, tenidos en cuenta como componentes del domicilio. 

Lo mejor es contactar con la aseguradora y tener una conversación en la que nos aclaren todos estos puntos antes de tomar una decisión.