iStock-1333184220.jpg

La energía de los paneles solares

Antes de hablar de la energía que produce un panel solar, debemos conocer un poco el funcionamiento de los mismos. Un panel solar es una estructura de aluminio encargada de captar la energía de la luz solar y transformarla para el consumo. Su principal componente son las células fotovoltaicas, que cuando el sol las toca, los fotones liberan electrones que van directos a un inversor.  

El inversor es el enlace entre la corriente generada por el panel y la energía que luego consumirás en tu casa por lo que de él dependerá que obtengas la máxima potencia para transformar la energía solar en electricidad para tu consumo. 

Energía de un panel solar  

Para conocer la energía que puede producir un panel solar tenemos que tener en cuenta diversos factores como el tipo de células de nuestro panel, (cristalinas o amorfas, aunque las cristalinas rinden mejor), el tamaño de la placa fotovoltaica ya que cuanto más grande sea, más energía podrá captar, la ubicación con motivo de las horas de sol diarias, o la potencia del panel solar, aunque las más comunes son las que producen entre 250 y 300 W, aunque también existen de menos potencia, o incluso de hasta 500 W. 

Poniendo como ejemplo un panel solar que produzca 300 W, que es la potencia producida en una hora, con 7 horas de sol al día produciríamos 2100 W, o lo que es lo mismo 2,1 kWh al día. Conociendo estos datos, podemos hacer una mejor estimación del tamaño y cantidad de placas solares que necesitaríamos en nuestra vivienda o local.  

Además, el número de células de nuestra placa influirá en la capacidad de generar más o menos energía, pero lo normal son paneles de 40 y 50 células.  

Inversores para tu panel solar  

Anteriormente hemos hablado de la importancia del inversor, para optimizar al máximo tu producción de energía, y existen diferentes tipos para poder escoger el que más nos convenga.  

Los inversores se clasifican según si está enganchado a la red o sí es autónomo. 

Cuando está conectado a la red se divide en tres subcategorías: 

  • Inversores tipo cadena: son los más comunes y económicos, y gestionan la potencia de todos los paneles a la vez adaptándose al rendimiento común. 

  • Microinversores: son los más pequeños del mercado y se pueden instalar de forma individual en cada panel solar aunque el coste es mayor a pesar de que asegura la mayor eficiencia. 

  • Optimizadores de potencia: uno de los más recomendados ya que combina las características de los anteriores.  

Y, cuando son totalmente autónomos, también existen dos variedades: 

  • Aislados: al no estar enganchados a la red eléctrica, adaptan la potencia individual a la requerida por una vivienda. 

  • Cargador: destacan por proveer de energía a los acumuladores para asegurar corriente eléctrica en los momentos en los que no haya luz solar. 

  • Híbridos 

solar