iStock-180694870.jpg

Así funcionan los paneles solares flexibles

Los paneles solares flexibles son una opción perfecta para aquellas personas que necesitan una energía ligera y portátil. Habitualmente se utilizan en instalaciones con estructuras curvas o como fuente de energía alternativa en autocaravanas, embarcaciones, coches o campings. 

Su funcionamiento es igual que el de cualquier panel solar, sin embargo, su estructura cambia. Los paneles solares flexibles no cuentan con marcos de aluminio ni cristal de seguridad. Están compuestos de células de silicio monocristalino mucho más pequeñas que las utilizadas habitualmente en los paneles rígidos. Hay dos tipos de soporte para estos circuitos fotovoltaicos: tela y plástico. Si son paneles con soporte de tela permitirán que se enrollen sin sufrir ningún daño; si están dispuestos sobre una base de plástico tendrán más robustez y resistencia. 

Otra característica de los paneles solares flexibles es que la caja de conectores está siempre ubicada en la cara superior, dejando una base llana y estable para su instalación. Gracias a este tipo de características, los paneles son resistentes, pero ofrecen una gran adaptabilidad a diferentes superficies. 

¿Cómo se instalan los paneles solares flexibles? 

Para instalar un panel solar flexible, deberemos tener en cuenta su ubicación final. Si queremos ponerlo en un lugar fijo, no serán necesarios tornillos dado que mediante un adhesivo fuerte podemos llegar a fijarlo a una superficie como el techo de una caravana o un barco. Normalmente, estos paneles están preparados para ser atornillados también y disponen de ojales en las esquinas que facilitan la tarea. 

¿Qué debo tener en cuenta a la hora de elegir un panel solar flexible? 

Como ya hemos comentado, el peso y su adaptabilidad son claves a la hora de decantarse por esta opción de panel solar. Pueden llegar a ser un 75% más ligeros que los paneles convencionales, por lo que es un gran aliado a la hora de ser transportado y se adaptan a espacios más reducidos o curvos donde no podríamos instalar un panel rígido. 

Los paneles solares flexibles están pensados para resistir a cambios de temperatura o humedad a pesar de que son opciones ligeras y flexibles. Habitualmente se usan a la intemperie y están preparados para aguantar diferentes condiciones climáticas. Estos paneles suelen tener una vida útil que se comprende entre los 25 y 40 años dependiendo de la calidad de sus materiales. 

En su proceso de fabricación, se emplean menos cantidad de materia prima que en paneles convencionales y esto lo convierte en una elección más sostenible con el medioambiente.  

Su mayor desventaja es que son menos eficientes que los paneles solares rígidos. Habitualmente necesitan más energía solar para producir electricidad y su eficiencia se reduce dado que es más complicado enfriarlos después de su funcionamiento. 

El precio de estos paneles solares flexibles también es un aspecto a tener en cuenta a la hora de escoger esta opción. Habitualmente son más baratos que los rígidos y ofrecen potencias similares a estos.

solar