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Cómo obtener el certificado de instalación de gas natural

El certificado de instalación de gas natural es un documento que tiene la función de acreditar que la instalación cumple con la normativa vigente y que está en condiciones de recibir el suministro.

Pero ¿conoces qué elementos lo componen o cómo obtener este documento? A continuación, te lo contamos.

¿Cuándo necesito obtener el certificado?

En cualquier caso, el certificado de instalación de gas natural es imprescindible para obtener el suministro de gas. Por parte de la distribuidora, un requisito fundamental es comprobar que la inspección se ha realizado de forma correcta por el técnico y que todos los elementos son apropiados.

Este documento deberá presentarse en los siguientes casos:

  • Alta en un inmueble de nueva construcción
  • Reactivación del suministro de gas si ha estado de baja durante un periodo de 2 años
  • Efectuar un cambio de instalación o sus elementos, como una caldera o un calentador/radiador
  • Cambio la comercializadora
  • Cambio la tarifa de gas

¿Qué contiene el certificado de instalación de gas?

Lo primero de todo es conocer el modelo IRG-3. Este documento tipo es el que debe rellenar y sellar el instalador para certificar que la instalación se encuentra en las mejores condiciones.

Dentro de él, podemos encontrar varios apartados que debemos conocer para que nuestro certificado sea completamente válido:

  • Dirección de la instalación
  • Datos de la empresa que realiza la inspección
  • Datos del instalador autorizado
  • Declaración de que la instalación se encuentra en buen estado
  • Datos técnicos como un croquis con los detalles de la instalación y resultado de pruebas específicas

¿Cuánto tarda un certificado de instalación de gas?

Cuando el instalador y la distribuidora verifican que el certificado cumple con la normativa vigente, registran la situación en la Dirección General de Industria de cada comunidad autónoma.

En el caso de que sea favorable, en siete días naturales se obtiene el certificado de instalación de gas. En caso contrario, a su vez, pueden darse dos escenarios:

  1. Anomalía principal. El instalador ha detectado una irregularidad (no se puede solucionar de forma más automática). Por tanto, se corta el suministro y se deberá resolver el problema.
  2. Anomalía secundaria. Esto significa que es una irregularidad de menor importancia y no es necesario interrumpir el suministro. Será necesario solucionar la anomalía en un plazo de 15 días.

 

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